Puerto Plata no es solo un destino de playas paradisíacas, es una ciudad llena de historia, cultura y hospitalidad que enamora a cada visitante. Fundada en 1502, su centro histórico conserva un aire colonial con casas victorianas coloridas, balcones de madera tallada y calles que cuentan historias de siglos pasados.

A pocos minutos del puerto de Taino Bay, los viajeros encuentran una ciudad vibrante donde lo antiguo y lo moderno conviven. La Catedral San Felipe Apóstol, la Plaza Independencia y el Museo del Ámbar son paradas obligatorias para quienes desean conocer la esencia de Puerto Plata.

Pero la ciudad no es solo historia: es también sabor y alegría. Caminar por el malecón, probar un ron dominicano, escuchar merengue en vivo o degustar un plato de pescado fresco frente al mar son experiencias que hacen que cada visita sea inolvidable.

Puerto Plata se ha convertido en un destino que lo tiene todo: cultura, gastronomía, historia y, por supuesto, playas bañadas por aguas turquesas. Y lo mejor de todo es que se encuentra a solo unos pasos del puerto, lo que lo hace perfecto tanto para cruceristas como para viajeros que desean explorar más allá de la arena y el sol.